Era una mañana importante para la ciudad rusa de Ulán-Udé,
donde se dieron cita diversos medios y personajes importantes para conocer la
nueva apuesta de la ciudad para convertirse en un ejemplo de vanguardia
tecnológica.
La compañía Rudron/Expeditor 3M y el gobierno de la ciudad
tenían en mente mostrar su nuevo e impresionante drone postal, el primero en su
tipo. El problema fue que la presentación no salió como esperaban.
Se trataba de un hexacóptero con un precio aproximado de 20.000 dólares, el cual llegaría a apoyar las labores del servicio postal entregando paquetes y cartas a los habitantes de Ulán-Udé y dentro de la región de Buriatia. El detalle fue que durante el viaje inaugural se estrelló estrepitosamente.