De todas las
cosas que he vivido, que a mis casi 50 años no son muchas pero tampoco pocas,
creo que la que más me ha marcado ha sido conocer y convivir con un asesino
silencioso, al mero estilo de Hollywood.
Por razones
obvias no puedo dar detalles, pero me atrevo a hablar después de muchos meses.
Al más inquietante estilo de Hollywood conocí a alguien que escudado en una imagen
de benevolencia y bonachonería envenena y mata a quienes le interesa. Nunca,
nunca, jamás lo habría imaginado y conseguir pruebas ha sido tan sorpresivo
como desconcertante pues aunque siempre tuve las pistas a mi alcance las
desechaba por ser algo tan descabellado. Pero no lo es.
Poco a poco fui
indagando, reuniendo testimonios casuales de acá y de allá, hasta conseguir
pruebas irrefutables. Allí entendí todas las incongruencias que este cariñoso y
dadivoso ser dejaba tras sí, pues el malo perfecto no existe (el bueno perfecto
tampoco, por cierto).
Viviendo en su
casa me sentía falsamente querido y protegido y ahora entiendo que pude haber
sido una más de sus víctimas en el momento en que lo considerara oportuno.
Quienes lo rodean no tienen la menor idea del tipo de persona que es, un
excelente (pero no perfecto) artista del engaño, de maldad enfática y gran
codicia. Porque envenenar lentamente personas hasta lograr parecer una muerte
como accidental (incluyendo la de su propia esposa) es un verdadero acto de
maldad ya sin importar el fin en sí mismo. Yo mismo creía ciegamente que todas
esas muertes eran casuales pues la muerte es parte de la vida, no un acto
excepcional. Pero no hay engaño perfecto y la verdad siempre sale a flote.
Y al mero estilo
de Hollywood esta persona sigue haciéndolo hasta hoy pues son pocos los que
sospechan la verdad y ninguno queremos involucrarnos, cobardía? Yo prefiero
llamarlo instinto de supervivencia.
Sólo espero que algún
día se haga justicia en nombre de estas personas que dejaron este mundo a manos
de esta persona. Si no se hace justicia aquí, al menos que se haga allá arriba
(más bien creo que allá abajo). Me encantaría dar más detalles pero valoro mi vida,
no quiero arriesgarme.