Diseñado como asistente de los médicos, Grace es un robot humanoide y está equipada con sensores, incluida una cámara térmica para detectar la temperatura y el
pulso del paciente, para ayudar a los médicos a diagnosticar enfermedades y
administrar tratamientos.
El androide también es una compañera para los pacientes. Especializada en el cuidado de personas mayores, Grace habla tres idiomas: inglés, mandarín y cantonés, y puede socializar y realizar terapias de conversación.
Robots como Grace pretenden ser un apoyo para los
profesionales de la medicina más que un sustituto, dice el fundador y director
general de Hanson Robotics, David Hanson.